hace varios días... murió!

Sí, hace ya varios días falleció.
Se fué. Se esfumó el alma de su cuerpo.
Aún está latente en cada uno de los que vivimos cerca suyo su gesto de vida.
Realmente no parece que se haya ido.
Sin embargo, todos, todos aquellos que no sintieron nunca su cariño dicen: -ánimo... ánimo!  que la vida continúa.-

No es nada decirlo, no es nada eso, vivir para contarlo.

Bien, el día que murió (aunque sabíamos que iba a pasar) todo nos sorprendió.
la vida es un cuento... sí, es un cuento.  Que termina. Siempre termina. Finales felices, finales tristes.

Lo cierto es que hoy no está la viejita.

En estos días sentí su presencia. No sé por que se alteraron los nervios.
La sentí cerca de mí! ... fue extraño.

Pero sentí calor y frío a la vez!

Sólo quiero que Dios la tenga consigo!


Gracias Mami!


A mi Vieja, en su primer de fallecida!

algo anda mal

El caos. Desorden.
Alteraciones del destino están haciendo sinuosa, cada vez más esta situación.  
¿Qué ocurriría si abdico?
Siempre hay un motivo para continuar, pero también existen motivos para claudicar.

Ah! Madre,   hoy te ví otra vez. No con una sonrisa.
Te ví entre cables y aparatos que pretenden incrementar tus días.
Te ví tan cerca y tan lejos.  

Quisiera saber qué piensas.  
Quisiera también  sentir tu dolor.  Pero sé además que no lo permitirías nunca.
Ojalá Dios te diera la oportunidad de estar otra vez en casa con los tuyos... con todos nosotros.
Qué tu   fortaleza te ha permitido aún estar... aunque sea respirando a través de esa máquina.

Eres un gran ejemplo en   mi vida.

Por favor Mamí: No te Vayas.

No te vayas aún, Mamí...    por favor no nos dejes.  
Todavía tienes cosas por hacer.  Tienes mucho amor para entregar.  Tanto amor, que no alcanza el tiempo para medirlo.

Ahora con lágrimas y un enorme nudo en la garganta, siento realmente que me te quiero mucho... más de lo que esperaba.

No te mueras Vieja!

No te mueras todavía!